¿Por qué se pierde la adherencia de los neumáticos?

Aprende por qué los neumáticos pierden adherencia y qué técnicas de conducción aplicar para evitar derrapes, mejorar el agarre y conducir más seguro.

Los neumáticos, tal y como se explica sobre ellos en el artículo Guía práctica de Neumáticos: presión, desgaste y seguridad al volante, es lo único que une el vehículo al suelo, de ahí su importancia.

Cómo funciona la adherencia de los neumáticos

La adherencia de los neumáticos, depende de varios factores, entre ellos podemos destacar:

  • la masa que soportan,
  • la superficie de goma que está en contacto con el suelo,
  • la superficie sobre la que circulan, la velocidad,
  • etc.

Ante una frenada en recta, la adherencia y la distancia recorrida, dependerá de la velocidad a la que circulemos, de la masa del vehículo, del estado de los neumáticos (banda de rodadura), de la presión de inflado, del estado de la suspensión y del tipo de superficie sobre la que se frena. Siempre independientemente del tipo de frenos que llevemos.

Pero ¿Qué ocurre cuando circulamos en curva?, aquí aparte de los factores mencionados, tiene una gran influencia la actuación del conductor.

Si la masa del vehículo (peso) tiene un efecto negativo si frenamos en recta, a mayor masa, más distancia necesaria para parar el vehículo, en curva estos factores se multiplican.

La masa del vehículo es siempre un factor negativo en la conducción.

Cuando frenamos en recta, el vehículo «presiona» la suspensión delantera, el coche baja del morro y la inercia se va perdiendo mientras se detiene el vehículo.

Pero si frenamos en curva, dicha masa al no poder seguir su trayectoria, ya que estamos girando el volante y frenando al mismo tiempo, tenderá a desplazar el vehículo lateralmente, haciendo que tengamos un derrapaje o el vuelco del vehículo.

La adherencia del neumático se puede perder, al superar su capacidad de agarre en recta, bien por bloqueo de las ruedas o por piso deslizante.

Si ocurre en curva, suele ser por superar la capacidad de deriva del neumático o por circular por piso deslizante.

En ambos casos la actuación del conductor es crucial.

El sistema ABS ayuda a que las ruedas del vehículo, no pierdan adherencia al frenar y siempre dispongamos de «dirección».

El sistema ESP ayuda a que el vehículo minimice los derrapajes en curva o en situaciones complicadas.

Pero la física está ahí para bien y para mal, por muchos sistemas que llevemos en el vehículo, si las fuerzas superan las leyes de la física, el vehículo derrapará si nosotros no hacemos nada para evitarlo.

Pérdida de adherencia de neumáticos

La pérdida de adherencia en curva, es lo peor que nos puede pasar, si no sabemos actuar a tiempo.

En dicha pérdida, influyen cuatro factores principalmente: La masa del vehículo, la velocidad a la que trazamos la curva, la adherencia de los neumáticos y nuestra actuación sobre el freno, la dirección y el acelerador.

  • A mayor masa, más posibilidad de derrapaje (los vehículos cuanto menos pesen, mejor).
  • A mayor velocidad de paso por curva, más posibilidad de pérdida de control.
  • Los neumáticos con una presión por debajo de las recomendadas, mayor posibilidad de deslizamiento por exceso de deriva, con mayor anchura (en seco), menos posibilidad de derrapaje.
  • La actuación del conductor en curva es crucial para su seguridad, no se debe tocar el freno ni el acelerador, una vez dentro de la curva, cualquier actuación sobre ellos, puede romper la adherencia de los neumáticos.

Subviraje

Si el vehículo tiende a «abrir» la curva, es decir, se va de morro, está subvirando, suele ocurrir en los vehículos con tracción delantera, la causa más normal, es por acelerar dentro de la curva, en este caso, no debemos tocar el freno, tan solo, sujetar el volante sin moverlo y soltar totalmente el pie del acelerador, poco a poco, al cargarse peso sobre el «morro» del vehículo, tiende a recobrar la adherencia en el tren delantero y seguir la trayectoria marcada por la dirección.

Sobreviraje

Hablamos de sobreviraje, si el vehículo tiende a «cerrar» la curva, es decir, se va de culo, les suele ocurrir a los vehículos con tracción trasera, sobre todo si aceleramos dentro de la curva, en este caso, lo mejor es soltar muy poco gas (si levantamos de golpe el pie del acelerador, perderemos más adherencia al desplazarse el peso hacia el morro y dejar con poco peso el culo del vehículo) y contravolantear, poner la dirección en el mismo sentido es que se desplaza el vehículo, si se nos va hacia la izquierda, poner el volante hacia la izquierda. Si tenemos alguna práctica en control del vehículo, se puede hacer sin soltar el pie del acelerador.

Aguaplaning

El aguaplaning o aquaplaning ocurre cuando las ruedas del automóvil no se adhieren a la carretera a causa de la lluvia o de un torrente de agua que cruce la carretera.

En estas circunstancias las ruedas “flotan” sobre el agua, por lo que el vehículo no responde al movimiento de la dirección y se queda con las 4 ruedas sin adherencia.

Se debe a varios factores específicos:

  • La cantidad de agua sobre la que se circula
  • La velocidad del vehículo
  • La presión que llevemos en los neumáticos, a más presión menor posibilidad de que se produzca.
  • El peso que recae sobre cada neumático por cm2, cuanto más ancho es un neumático, menos adherencia tendrá.
  • La profundidad del dibujo de los neumáticos, mínimo por ley 1,6 mm aconsejable 3 mm.
  • La clasificación de los neumáticos para circular por agua

Cómo actuar ante el Aguaplaning

  • Llevar siempre el volante con las dos manos y que están estén “enfrentadas”, es decir, una frente a la otra sujetando el volante
  • NUNCA FRENAR
  • Soltar el acelerador poco a poco, el vehículo al perder velocidad volverá a tener adherencia
  • No hacer movimientos bruscos con el volante

Nieve y hielo

Conducir con nieve o hielo es especialmente peligroso, ya que los neumáticos pierden gran parte de la adherencia y el vehículo responde peor al frenar o girar. Por debajo de 7 ºC los neumáticos convencionales reducen su eficacia, por lo que conviene:

  • Aumentar la distancia de seguridad.
  • Reducir la velocidad.
  • Circular con marchas largas (arrancar en 2ª y evitar la 1ª).
  • Usar el freno motor en lugar de frenar bruscamente.
  • Realizar giros suaves y sin movimientos bruscos.

Para más consejos para conducir con nieve, consulta el artículo Consejos para conducir con nieve de forma segura de nuestro blog.

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